Paraná: Cataratas, tradición y aventura

Paraná: Cataratas, tradición y aventura

27 septiembre, 2022 Off By admin

El estado sureño de Paraná es conocido por ser la sede del Parque Nacional do Iguaçu, pero Paraná es mucho más que las Cataratas, consideradas una de las maravillas del mundo. Pero el paseo viene con ñapa, ya que visitando un país pueden conocerse tres, e incluye una larga lista de atracciones del sur de Brasil que van más allá de los recorridos de sol y playa más tradicionales.

 

Curitiba, la ciudad ecológica

La capital del estado de Paraná suele recibir apodos como “ciudad sonrisa” y “ciudad ecológica”. Planificación y calidad de vida son las premisas con las cuales se fue modelando la ciudad a partir de la década de 1970. Se desarrolló una ampliación de la red de transporte público, la peatonalización del centro histórico y la proliferación de terrazas verdes. Cualquier visita a la ciudad -que cuenta con un servicio de buses turísticos rotativos- debe incluir una visita al Jardín Botánico, célebre por su invernadero de vidrio inspirado en el Palacio de Cristal de Londres. Sus 245.000 m2 incluyen un bosque de araucarias y gran variedad de jardines, recibe a un millón de visitantes por año y es de acceso gratuito. Otros parques referenciales de Curitiba son el Barigui, el Bosque del Alemán, el Tanguá y el Das Pedreiras que alberga al teatro de la Ópera del Alambre, un recinto totalmente metálico construido sobre un lago y rodeado de peces, patos y mucha vegetación. Otros imperdibles son el Museo Oscar Niemeyer (apodado Museo del Ojo, por la forma de su fachada), con exposiciones permanentes y temporales para todos los gustos, y el centro histórico. En este último se concentra un legado con patrimonio arquitectónico que incluye edificios y monumentos de gran valor, y todos los domingos acoge la feria de antigüedades y gastronomía más famosa de Curitiba en el Largo da Ordem.

 

Foz do Iguaçu: Cataratas y mucho más

Dejando atrás el clima fresco de Curitiba, Foz (a 635 km de distancia) recibe a los viajeros con el calor y humedad que caraterizan a la principal atracción de la ciudad, el Parque Nacional do Iguaçu, que tiene un lado en Brasil y otro en territorio argentino. En ambos lados de la frontera, las Cataratas son uno de los monumentos naturales más deslumbrantes del mundo. El recorrido por las Cataratas insume como mínimo un día entero, incluyendo paseos (imperdible el Macuco Safari!) y pausas para comer; las entradas oscilan entre los 5 y 20 dólares, con precios diferenciados para niños, adultos, residentes locales y extranjeros. Antes de llegar, el Parque de las Aves permite interactuar con especies nativas y cuenta con 1.500 aves de 140 especies en un terreno con naturaleza preservada. El Marco de las Tres Fronteras (una visita simultánea a Brasil, Argentina y Uruguay) es una visita recomendable, así como la YUP STAR FOZ, una rueda con 88 metros de altura que está en el ranking de las más altas de Brasil. Para cerrar el recorrido, la hidroeléctrica de Itaipú es una de las atracciones más conocidas de la ciudad: la usina genera energía eléctrica para Brasil y Paraguay, y abriga la réplica de una misión jesuítica, un mirador panorámico y el Refugio Biológico Bela Vista, donde los visitantes pueden observar animales de 50 especies, entre ellos ocelotes, coatíes, cocodrilos, cóndores reales, serpientes y hasta jaguares.

Morretes

Es una ciudad histórica ubicada en el litoral del Paraná, a unos 45 minutos de carro desde Curitiba. Fundada en 1733, Morretes conserva su encanto por la presencia de casonas que datan de 1800 a 1900, muchas de las cuales han sido renovadas con mucha gracia y que hoy albergan tiendas de artesanía y restaurantes. Uno de los clásicos es el viaje en el tren que sale de Curitiba en un vagón antiguo que atraviesa bosques surcados por el río Nhundiaquara, senderos, cascadas, y un paisaje entre bucólico y vibrante. En Morretes, las riberas del río forman un hermoso escenario entre puentes, casonas y vegetación frondosa con varios puentes que complementan el paisaje; también hay paseos por el río desde la localidad de Porto de Cima, a 6 km del centro. Con clima templado la mitad del año, uno de los clásicos de la ciudad es el Festival Sabores do Litoral, a que se lleva a cabo durante el invierno para promover el turismo en la región. Para tomar nota: el plato paranaense más típico es el Barreado; de origen azoriano, es un guiso de carne en olla de barro con harina de yuca, que se come tanto con frío como en verano, lo mismo que el chimarrão -también conocido como mate en el sur del continente- una infusión que es el sello de identidad de la región.