En el corazón del Tolima, el Festival Gastronómico de Payandé, “Sabores de mi Tierra”, se ha convertido en mucho más que una feria culinaria: es el encuentro vibrante entre la cultura, el arte, la música, la danza, la literatura y sobre todo, la fuerza imparable de las mujeres emprendedoras.

Hace seis años, de la mano de CEMEX Colombia, nació este festival con un propósito claro: activar la economía de los hogares de Payandé y abrir oportunidades reales de empleabilidad.

Desde entonces, ha sido una plataforma clave para visibilizar y fortalecer los pequeños negocios familiares dedicados a la gastronomía típica.

Aquí se celebran las delicias que dan identidad al territorio: la empanada doradita, el pastel de pollo casero, la arepa natural o la de chócolo con queso derretido; productos lácteos como los quesos artesanales, que recorren las mesas de la región; platos tradicionales como la lechona, el tamal, las hamburguesas criollas, el chorizo y la longaniza.

Cada receta cuenta una historia de resiliencia, de mujeres y familias que encontraron en la cocina una forma de dignificar su vida.

Hoy el festival gastronómico también es un espacio para los jóvenes. La Institución Educativa San Miguel de Payandé se sumó con su propio Festival Folclórico Colombiano, donde los estudiantes bailan, cantan y narran el legado cultural del país. Este esfuerzo colectivo demuestra que cuando la educación se une con la tradición, se construye una comunidad más fuerte y consciente.

Además, la corporación de empresarios turísticos de Payandé se ha unido a esta gran causa, impulsando el turismo rural como una alternativa de desarrollo. Gracias a esta sinergia entre educación, cultura, gastronomía y turismo, Payandé se posiciona como un territorio de paz, sabor y esperanza.

¡Bienvenidos a Payandé! Donde cada plato tiene un alma y cada visitante se convierte en familia.