Bioprotección Colombia, innovación en la moda al servicio de las personas y el personal de salud

Bioprotección Colombia, innovación en la moda al servicio de las personas y el personal de salud

3 junio, 2020 Off By admin
  • La idea surgió en medio de la cuarentena obligatoria y pensando en la mejor forma de apoyar a las personas que deben estar trabajando desde diferentes frentes que no sea su casa en tiempos de pandemia.  
  •  Bioprotección Colombia, es un overol elaborado en tela liviana y fresca para que pueda ser usada en todos los climas y a la vez proteja a las personas del Covid- 19.
  • La Fundación Santa Fe de Bogotá recibirá un 10% del valor total de cada traje para continuar aumentando su capacidad de servir a todos los colombianos.

Bogotá, mayo de 2020. Trajes que cumplen con los requerimientos necesarios de salubridad para que las personas que deben salir a la calle en tiempos de restricciones por el Covid-19, lo hagan con libertad, comodidad y protección. Estos overoles fueron creados a partir de una alianza entre el programa Gestión de la moda de LCI Bogotá – Institución Educativa, la Fundación Santa Fe de Bogotá, como asesor científico, y el Centro Comercial el Gransan.

Esta es una iniciativa que nació al interior del programa Gestión de la moda y que cuando llegó a la rectoría lo único que quedaba por hacer era apoyarlo como proyecto institucional. Nos sentimos muy orgullosos de liderar un plan que permitirá que muchos colombianos puedan desplazarse hasta sus lugares de trabajo con más tranquilidad. Además, Bioprotección Colombia, habla de las cosas grandes e importantes que desde la moda se pueden desarrollar cuando los proyectos se trabajan con los aliados indicados, en este caso, el respaldo científico de la Fundación Santa Fe de Bogotá, la manufactura de los confeccionistas del GranSan y la gestión de LCI a través del cuerpo docente y estudiantes del programa que permitió articular este proyecto en tiempo récord”, indicó Álvaro Andrés Lozano, Chief Operating Officer de LCI LATAM

Bioprotección Colombia, es un overol completamente elaborado en poliéster textil, cierre con cremallera frontal, pestaña para cubrir cremallera, elástico en puños y botas. Cuenta también con una capota con elástico en el borde para brindar el ajuste al contorno de la cabeza y generar así la protección necesaria del usuario. El traje fue el resultado de un proceso de colaboración y cocreación intersectorial dónde los expertos confeccionistas del Centro Comercial el GranSan, con el aporte académico de LCI Bogotá y bajo las recomendaciones de bioseguridad de la Fundación Santa Fe de Bogotá. Su elaboración y comercialización permitirá que más de 25 mil familias de diferentes talleres de confección puedan empezar a reactivar su economía cumpliendo con todos los protocolos de seguridad que exigen las autoridades en medio de la cuarentena.

Además de velar por la seguridad de esta población, cabe recalcar que la Fundación Santa Fe de Bogotá recibirá un 10% del valor total de la prenda, recursos que serán invertidos para continuar adecuando sus instalaciones para aumentar la capacidad de servir en salud a Bogotá y Colombia, además de garantizar la protección del equipo en salud, que son la primera línea de atención de esta pandemia.

Para el emprendedor, específicamente para cientos de famiempresas que hacen parte del GranSan, es muy importante haber sido tenidos en cuenta para este proyecto que no solo contribuye a la reactivación de la economía con lo que eso representa para el país, sino que ayuda para que muchas personas que deben retomar su actividad laboral puedan estar un poco más protegidos mientras están en la calle cumpliendo con sus obligaciones. Los confeccionistas estamos cuidando cada detalle en la fabricación de los overoles Bioprotección Colombia, para que el usuario final los pueda usar con tranquilidad”, aseguró Yansen Estupiñán, gerente del centro comercial el GranSan.

Es importante destacar, que el overol Bioprotección Colombia, no es apto para uso médico, ni evita el contagio, pero sí disminuye el riesgo siempre y cuando se use de la manera adecuada entre las personas que deben desplazarse en transporte público o estar en la calle, bien sea por razones de trabajo o personales, debido a que es fácil de poner, quitar, lavar y secar.