Asegurar el derecho al agua y al saneamiento básico, la deuda de Colombia

Asegurar el derecho al agua y al saneamiento básico, la deuda de Colombia

2 enero, 2024 Off By admin

El agua residual y la no tratada
transportan bacterias y microorganismos que pueden generar enfermedades e incluso ocasionar la muerte. En
Colombia cerca de 3,8 millones de personas consumen agua que no es apta para
los humanos. De los 1.122 municipios del
país, solo 541 cuentan con algún tipo de
planta de tratamiento. Investigadores de
la UNAL proponen una hoja de ruta para
enfrentar la problemática.
El agua es un derecho fundamental
que los Estados deben garantizar; en ese
derecho, el acceso, la disponibilidad y la
salubridad del recurso son prioritarios
para vivir y hacer tareas básicas como bañarse, comer o lavar la ropa.
En Colombia la situación es preocupante: cerca de 3,8 millones de personas
toman agua no apta para consumo humano (Sistema de Vigilancia de la Calidad del
Agua-Instituto Nacional de Salud, 2020).
El servicio de tratamiento de aguas residuales es insuficiente, de los 1.122 municipios del país, solo 541 cuentan con
algún tipo de planta de tratamiento de
aguas residuales (Superservicios, 2018).
Tomado de El Periódico Universidad Nacional
Por: Fernando Helí Romero Ordóñez | Profesor
de Geociencias de la Universidad Nacional de
Colombia (UNAL)
Fotos: Perfil . Acción contra el Hambre.
Las corrientes de agua se pueden
contaminar de varias maneras: (i) por
aguas residuales de origen urbano o rural –también llamadas negras o cloacales–, que son las que provienen del uso
doméstico, como baños, lavadoras y fregaderos, entre otras; (ii) por aguas residuales industriales provenientes de todo
tipo de industrias, incluyendo la del petróleo y las químicas, que producen algunas sustancias contaminantes peligrosas
como compuestos químicos orgánicos y
elementos químicos inorgánicos; y (iii)
por aguas de origen agrícola, que contienen agrotóxicos, plaguicidas y herbicidas
que causan la muerte de plantas y animales acuáticos. Además, los fertilizantes
causan un desarrollo excesivo de algas,
que desequilibran el ecosistema.
Las principales enfermedades asociadas con falta de saneamiento básico son
diarreas generadas por Escherichia coli,
disentería bacteriana, fiebre tifoidea,
dengue, infecciones por salmonella, cólera, leptospirosis, hepatitis A, rotavirus
como agente transmisor de gastroenteritis, enfermedades parasitarias (Cryptosporidium, Giardia lamblia), amibiasis y
arboriasis, parásitos intestinales (Ascaris
lumbricoides y Trichuris Trichiura) y Tracoma, entre otras.
El saneamiento básico es un conjunto de servicios que incluye la distribución de agua potable, el tratamiento de
aguas residuales, redes de distribución,
colecta de residuos sólidos, incineración
de productos tóxicos, entre otros. Estos
servicios tienen un impacto directo en la
salud del ser humano, su calidad de vida
y en el desarrollo de la sociedad.
Los investigadores de la Cátedra Pasivo Ambiental ofrecida en el Instituto de
Geociencias de la Universidad Nacional
de Colombia (UNAL) plantean que:
1. En Colombia es necesario un
nuevo marco regulatorio de saneamiento
que modifique la política actual, lo cual
también podría ayudar a la economía
pospandemia.
2. Es importante unificar las leyes regulatorias emitidas conjuntamente
por los Ministerios de Salud y de Medio
Ambiente, y las Corporaciones Autónomas Regionales. Las autoridades deben
gestionar para que los acueductos rurales presenten mayor eficiencia y eficacia
respecto a la potabilización del agua y su
distribución.
3. Se deben definir las situaciones ambientales que representan peligro
para la salud de los seres humanos e implementación del Pasivo Ambiental en el
país como ley.
4. Es necesario estimular la inversión pública y privada para el desarrollo
de acueductos, redes de distribución de
agua potable, estaciones de tratamiento
de aguas residuales, cooperativas de reciclaje y centros de enseñanza ambiental.
Los estudios realizados en la Cátedra
del Pasivo Ambiental también indican la
necesidad de promover la cátedra ambiental en sala cunas, escuelas y colegios.
Estimular el desarrollo ambiental e inversión económica en todas las regiones del
país generará progreso, incremento de la
construcción civil, empleo, mejoría en la
salud de la niñez y adultos mayores, menos problemas de internación hospitalaria, desarrollo urbanístico y cultural.